3 maneras de dejar de malgastar dinero en juguetes infantiles
Creo que la mayoría de nosotros tenemos que hacer una pequeña confesión. Nuestras casas están llenas de juguetes con los que no se juega muy a menudo. Entre nuestros hijos, cada Navidad y cada cumpleaños llega una montaña de juguetes.
Aunque aprecian cada juguete cuando lo abren, sólo juegan con unos pocos más de una o dos veces.
A lo largo de los años, he aprendido a ser más prudente con mis elecciones gracias a las experiencias con juguetes que resultan ser una buena relación calidad-precio. He aquí algunas sugerencias que te ayudarán a gastar tus euros en juguetes sabiamente.
1. 1. Busca la versatilidad
Mi hijo pequeño sigue jugando con los viejos Lego y bloques de madera de su hermano mayor. Hemos ido ampliando nuestra colección a lo largo de los años y ahora tenemos suficientes como para construir una ciudad que ocupa la mitad del suelo del salón. Lo curioso es que, aunque tenemos juguetes "de verdad" de Star Wars, mis hijos siguen construyendo sus propias escenas de Star Wars con bloques. Recuerdo haber hecho lo mismo con mis Barbies.
En general, cuanto menos efectista sea un juguete, más formas encontrarán los niños de incorporarlo a su juego. Busca juguetes que se basen en la imaginación del niño y no en pilas. No descarto del todo los juguetes basados en personajes populares como Star Wars o Spiderman, pero en lugar de decir esa web-blaster que dura 3 minutos y luego necesita una recarga costosa (¡cometimos ese error una vez!), elegiré una figura de acción simple o un vehículo o un sofá de juego que podría ser lo que tu hijo quiera que sea.
2. Vale la pena pagar por la calidad
Los juguetes superbaratos tienen su lugar, pero la mayoría de las veces se rompen y no funcionan como deberían. No sólo es un despilfarro, sino que también puede suponer un riesgo para la seguridad. Los mejores juguetes suelen ser los que aguantan el juego duro. Cuanto más complicados son o tienen muchas piezas, pueden desprenderse rápidamente y acabar en lugares que no quieres, ¡como en el suelo de tu hijo! Es mejor comprar menos juguetes que estén bien hechos. No sólo tu dinero estará bien gastado, sino que tu hijo se frustrará menos y podrá disfrutar de sus juguetes durante mucho tiempo.
3. Busca juguetes que fomenten la actividad
Mis hijos de 3 y 5 años juegan sin parar con su sofá de juegos desde que los recibieron en su cumpleaños. Les encanta construir fortalezas y obstáculos y vivir gloriosas batallas y aventuras de niños. Aunque a los padres nos da un poco de miedo verlos, se lo pasan en grande y hacen el ejercicio que tanto necesitan.
Los niños necesitan correr y mover el cuerpo, así que los padres debemos aprovechar cualquier oportunidad para que salgan y se muevan. Los juguetes que fomentan esta actividad no tienen precio. Aunque no te entusiasme la idea de las batallas de espadas, todos son clásicos atemporales que proporcionarán horas de juego a tu hijo.
Ahora mismo, el grupo de niños con los que juegan mis hijos ha construido una nave espacial con un par de cojines de sofá de juguete que encontraron en el salón. Inventan historias maravillosas y corretean por el patio de recreo mientras llevan a cabo sus misiones.